Ahora que ya saltamos el tiburon,
que ya está de nuevo todo mal,
que ya te fuiste pisando fuerte,
que ya encontrarse la misma puerta:
cerrada, la misma mente: cerrada,
una vez más te sentís una pelotuda.
Así nomás. Sin nombres bonitos.
No podés. Ser tan pelotuda.
Y que la gente te de bola.
Para aprovecharse de vos.
Y vos caigas. Cada vez.
Llores y engordes y escribas.
Pensar en suicidio. Venganza.
Convirtiendote en hikikomori.
???
Más de lo mismo.
hola paloma
ResponderBorrar